En agitada sesión del
Congreso de la República, de ayer jueves, la Congresista Verónika Mendoza
exigió que el Ministro de Energía y Minas Jorge Merino presente los estudios
técnicos y económicos que sustenten los proyectos que está planteando su sector
respecto al gas de Camisea. “No hay una política energética clara, seria y
planificada, se nos dice una cosa y luego otra, no queremos que nos sigan
meciendo, necesitamos documentos que verifiquen lo que se nos está diciendo”.
En ese sentido exigió que el Ministro alcance documentación que sustente la
existencia de un proyecto para el etanoducto (que sustituye el GSA) así como su
inclusión como proyecto de inversión de Petroperú, el estudio de
mercado que demuestre que hay clientes potenciales para el mismo, así como los
documentos que demuestren que éste proyecto no afecta la rentabilidad del
Gasoducto Sur Andino.
También mostró su preocupación por el hecho de que el DS 008-2012-EM por el
cual se recuperó el gas del lote 88 –regulado y barato- no haga referencia a la
ley 29129 que establece la prioridad del abastecimiento de la región sur, lo
cual deja abierta la posibilidad de que se destine a otros fines. “Se nos dijo
que ese gas barato y regulado era para el GSA. Hoy Ud. nos dice que irá por el
gasoducto del Consorcio Camisea. ¿Vamos a depender del Consorcio Camisea para
los otros proyectos?”, pregunto la congresista Mendoza.
Señaló también su extrañeza por el hecho de que los proyectos de ley
enviados por el Ejecutivo prevean destinar recursos del FISE como garantía de
inversión a favor del concesionario del tramo I (Malvinas- Quillabamba) cuando
este fondo estaba destinado exclusivamente por ley a las poblaciones
vulnerables.
La congresista también dio
cuenta de los pronunciamientos de diversos sectores de la población sureña
exigiendo que se cumpla con el proyecto integral del GSA, como el
pronunciamiento del Consejo Regional de Colegios Profesionales del Cusco que
exige también la renuncia del Ministro Merino.
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